Dar a conocer a sus empleados pautas de mantenimiento y cuidado para los EPIs no sólo le permitirá asegurar la eficacia de los mismos, sino que también le permitirá alargar la vida útil de estos equipos. Éstos son los errores más frecuentes relacionados con el uso de los EPIs que su empresa debe evitar:
- Que los empleados laven en casa
los uniformes especiales de trabajo (considerados como EPIs por tener
características especiales para proteger la seguridad del trabajador que
los utiliza), porque pueden dañar los tejidos si, por ejemplo, emplean
un detergente que no es adecuado. Es importante además que los empleados
no laven en casa estos uniformes porque además pueden contaminar la
ropa de la familia con determinadas bacterias presentes en el puesto de
trabajo, residuos de sustancias peligrosas, etc.
- Permitir a los empleados colocar los EPIs encima de la superficie de trabajo, debido a que se ensucian y dañan con gran facilidad.
- Permitir a los empleados guardar los EPIs en sus propias taquillas,
ya que pueden sufrir daños al estar en contacto con otros materiales u
objetos que el trabajador puede tener allí, además de que es más difícil
garantizar que personas no autorizadas puedan acceder a estos equipos
de trabajo.
- Consentir que los trabajadores limpien o incluso reparen sus EPIs sin contar con la formación específica necesaria.
- Encargarse del lavado
o limpieza de los uniformes considerados “vestimentas especiales de
trabajo”, para garantizar su correcta limpieza y el mantenimiento de sus
características.
- Para evitar que los EPIs se ensucien y dañen, proporcionar estuches adecuados en los que los trabajadores puedan guardarlos con seguridad.
- Habilitar un espacio en el que exclusivamente se puedan guardar los EPIs y restringir el acceso a esta zona.
- Limpiar los EPIs tras su uso para eliminar el polvo y la suciedad que hayan podido acumularse.
- Sólo el proveedor o una firma autorizada podrán reparar los EPIs.
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