El Ayuntamiento de Miranda del Castañar, condenado por acoso laboral a la ex secretaria
La demandante, Yolanda Claviño, declara que sufrió discriminación "durante años"
15.03.2014 | 04:45
CASAMAR
El Juzgado Número 1 de Salamanca ha condenado al Ayuntamiento de Miranda del Castañar por acoso laboral contra la ex secretaria, Yolanda Claviño.
El fallo del juez cita que la demandante sufrió “acoso” por parte del
actual equipo de Gobierno. El Ayuntamiento deberá abonar nominas
impagadas, vacaciones y una indemnización por concretar, aunque pueden
recurrir.
La sentencia refleja las diferentes alegaciones de la demandada contra el Ayuntamiento, en las que se cita, por ejemplo que se le impedía desempeñar su trabajo “cambiando claves e impidiendo acceso a documentación”, “culpándola de hechos en los que no intervino” y “difamando sobre su trabajo”. En el ámbito laboral, Yolanda Claviño explica que “se retenían mis nóminas de forma intencionada y se me impedía del disfrute de vacaciones”. Sobre su acoso o como se cita en la sentencia “mobbing” el documento jurídico refleja que “sufrió trato vejatorio y comentarios despectivos” lo que provocaría depresiones que obligaron a la demandante a “cambiar de residencia a un municipio cercano” y recibir “tratamiento psicológico y psiquiátrico”.
El Ayuntamiento en su defensa niega los cargos y expone que la demandante “mostraba oposición a todas las directrices” añadiendo además una “dejadez de funciones”. La actual Corporación explica también que la ex secretaria era una interina designada por la anterior corporación y que se oponía al actual equipo de Gobierno.
La sentencia refleja las diferentes alegaciones de la demandada contra el Ayuntamiento, en las que se cita, por ejemplo que se le impedía desempeñar su trabajo “cambiando claves e impidiendo acceso a documentación”, “culpándola de hechos en los que no intervino” y “difamando sobre su trabajo”. En el ámbito laboral, Yolanda Claviño explica que “se retenían mis nóminas de forma intencionada y se me impedía del disfrute de vacaciones”. Sobre su acoso o como se cita en la sentencia “mobbing” el documento jurídico refleja que “sufrió trato vejatorio y comentarios despectivos” lo que provocaría depresiones que obligaron a la demandante a “cambiar de residencia a un municipio cercano” y recibir “tratamiento psicológico y psiquiátrico”.
El Ayuntamiento en su defensa niega los cargos y expone que la demandante “mostraba oposición a todas las directrices” añadiendo además una “dejadez de funciones”. La actual Corporación explica también que la ex secretaria era una interina designada por la anterior corporación y que se oponía al actual equipo de Gobierno.
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